Delirium Tremens! Delirio de Tremere! todo calza pato!... bueno xD
Hojeando algunos libros en la especial biblioteca de Bert, Alicia leyó algo que llamó particularmente su atención: "El viaje Astral" explicado con lujo de detalles, a más no poder, a toda raja (no me aguanté xD).
Aproximadamente alrededor del primer año de su no-vida, su Sire, Bert, se había encargado de instruirla en todo lo que él consideraba necesario saber sobre el mundo de los malditos Cainitas.
Un acontecimiento especial en ese entonces generó un extraño giro en la forma en que la pequeña Alicia comprendería su entorno, quizá para siempre.
"Esos Tremeres manipulan la sangre de sus enemigos como si fuera una simple herramienta" comentó Bert al aire.
Un cuervo voló sobre la mesita de té donde ambos estaban sentados (si, estaban sentados en la mesa) y una de sus negras plumas cayó sobre ellos. Eso fue, eso fue todo, ese fue el mensaje. Tremere estaba decidido a acabar con ella. ¿Cómo? A través de su mente. Sintió por primera vez de muchas como su cabeza ya no era un sitio seguro donde atesorar pensamientos, sentimientos, recuerdos ni conocimientos. Sintió muchas veces a ese maldito Tremere, maldito maldito Tremere, abrir su cráneo como si de una cartera se tratase y buscar, revolver, observar, sacar y poner. Muchas veces se encontró observando imágenes que no estaban dentro de su mente, sintiendo emociones que no le correspondían y, sobre todo, y lo más peligroso, pensando pensamientos que no le pertenecían para pensar.
Y así pasaron 5 años de tormento silencioso.
No se atrevió nunca a contarle a Bert. Hacerlo sería plantar la mente de Tremere en la mente de su querido Sire, no estaba dispuesta a hacerlo, bajo ninguna circunstancia. Después de todo ya nada era seguro, nunca más supo qué le pertenecía legítimamente a ella y qué era una vil argucia de el "sapiento" pseudo mago Tremere.
Ahora volvemos a la noche en que Alicia descubre este texto sobre El Viaje Astral, y aquí fue donde estuvo segura de todo, supo de debía protegerse, y supo también como hacerlo.
La más mínima cosa en desorden y ella y Bert la pagarían con sus no-vidas, sucumbirían a la voluntad de Tremere y habría oscuridad eterna para ambos.
"Pero claro! los espejos" pensó Alicia. "Los espejos tienen la clave, ellos son los que reflejan! LO REFLEJAN TODO!! (si, a los Lasombra también, lo otro es que no se vean)" Lo supo cuando fue iniciada, el quiebre del cristal reflejaba el mismo quiebre de todo, su vida, su mente, su corazón!! todo era cierto, y utilizaría esto para defenderse.
Corrió al espejo más cercano y claro! ¿cómo no lo había visto antes? Frente al espejo estaba a salvo, podía pensar con claridad, era nuevamente la ama y señora de lo que haya sido que tenía dentro de esa cabeza enana.
Así fue como empezó a poner obsesivo esmero en mantener su espejo a salvo, no había lugar donde éste no la acompañara. Incluso dormía los días con el espejo dentro de su boca, donde protegía sus sueños de ser también robados por este... cosa.
Otro asunto importante: las palabras. Como una llave a su cerradura lo era Trastocar a Tremere. Había una magia especial en esa palabra, implícita en su mismísimo significado. Decirla u oírla, tener esa palabra 9 veces en la mente y sería el fin.
Así fue como comenzó el excruciante Delirio de la pequeña Alicia, quien perdió a Bert y perdió su espejo. Dios los libre xD
La raja jajaja :)
ResponderEliminarI like to read a little more
saludos!